- El Banco Central compró casi USD 500 millones esta semana, sumando USD 1.530 millones en octubre y casi igualando su mejor registro para este mes (octubre 2009, USD +1.550 millones). En relación con otros años, el buen desempeño no obedeció a una liquidación inédita del agro, que en un contexto de bajos precios internacionales aportó USD 2.500 millones -un buen número, pero no extraordinario: en octubre 2021 había vendido USD +2.420 millones, por ejemplo-, sino a la baja demanda neta del resto de la economía: USD -950 millones, también piso desde 2009 (USD +430 millones).
- La emisión de obligaciones negociables sumó al menos USD 1.800 millones durante el mes pasado, a la vez que el crédito a privados en moneda extranjera aportó USD 800 millones. Dado que las firmas deben vender las divisas que obtienen por esta vía al Banco Central, esto revela que la emisión de Obligaciones negociables y los préstamos a privados más que explicaron todas las compras del BCRA en octubre.
- A nivel económico, esto implica que, en octubre, la cuenta capital más que financió el déficit de la cuenta corriente. La flexibilización de las cuotas para la compra de dólares para importar bienes, más las salidas al exterior que promueve la dinámica de apreciación cambiaria y una estacionalidad adversa de la balanza comercial en esta época del año, revirtieron el superávit de la cuenta corriente, por ahora “salvado” por la entrada de dólares financieros.
- En este escenario de déficit cambiario de bienes y servicios financiado con la entrada de dólares financieros -por ahora privados-, el contexto internacional es cada vez más relevante. En la última semana hubo señales mixtas en este frente. Por un lado, el desempleo cayó de 4,3% a 4,1% en Estados Unidos, a la vez que la inflación PCE -la que toma en consideración la Fed para sus decisiones de tasa- fue de 0,2% en septiembre, quedando dentro del rango objetivo. Sin embargo, producto de la relajación de la política monetaria de China y Europa, el dólar se apreció 3,2% en octubre, impactando negativamente en los commodities (el precio del poroto de soja se contrajo 7,6% durante el mes pasado, el del maíz 2,5% y el del trigo 2,6%). Mucha fragilidad en poco tiempo.