Cuattromo comenzó su intervención señalando que “hoy contamos con las herramientas para tener un sistema de bancos de desarrollo, sobre lo cual hay mucho para trabajar”, aunque indicó que “también hay mucho aprendizaje acumulado en este tiempo”.
En esa línea explicó que “cuando hablo de sistema de banca de desarrollo me refiero a la cantidad de: instituciones; bancos públicos; empresas vinculadas a estos bancos, cómo es el caso del Grupo Provincia; las empresas públicas que ofrecen garantías como Garantizar, FONDEP o Fogaba; todo eso nos permite articular un conjunto de herramientas que nos posibilita cumplir el rol de financiar las actividades de desarrollo”.
Asimismo, señaló que la manera de cumplir esa tarea es “articulando esas herramientas”. Y añadió: “Por ejemplo, nosotros hemos firmado convenios donde el BICE nos otorga financiamiento en determinadas condiciones, que luego Banco Provincia, Provincia Leasing o alguna de nuestras empresas, lo acercan al sector productivo en condiciones favorables”.
“También hemos articulado iniciativas con el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, donde ellos señalan determinados objetivos para la inversión y al mismo tiempo ofrecen garantías para que las operaciones se puedan realizar, por la importancia que implica la administración de riesgos, que siempre es un desafío para la banca de desarrollo”.
Por otra parte, consideró que estas instituciones también deben cumplir “una tarea permanente y muy profunda de capacitación de las empresas, para que puedan incorporar nuevas tecnologías, nuevos conocimientos, para que puedan aprender a exportar, y así acompañarlas durante el crecimiento con su actividad productiva”.
En ese sentido, consideró central “discutir el marco regulatorio en el cual operamos los bancos públicos, porque hoy es el mismo que para la banca privada pero nuestros objetivos son diferentes. Esa diferencia tiene que tener un reflejo en los marcos normativos, para que a partir de nuestra tarea de articulación de las diferentes herramientas que tiene el sector público podamos generar la acción de financiamiento que buscamos”.
Hacia el final, Cuattromo habló sobre la coyuntura económica y dijo que “la región venía de un proceso de estancamiento que se profundizó por la pandemia, pero hoy la economía argentina se está recuperando fuertemente y es momento de empezar a discutir cómo acompañar este crecimiento, cómo darle salida exportadora, cómo hacerlo cuidando también nuestro mercado interno, protegiendo a las trabajadoras y los trabajadores e incorporando nuevas agendas, como la sostenibilidad y la igualdad de género”.
Sobre este último tema recordó que “a partir de un acuerdo con el Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, en Banco Provincia creamos una línea de créditos para Inversión con tasa subsidiada destinada a pymes lideradas por mujeres, de manera de ir rompiendo techos de cristal que se ven no sólo en el sector público, sino también en el privado”.
“El mundo todavía transita los coletazos de sucesivas crisis sobre las cuales no hemos podido aún establecer las reglas de juego internacionales. El mercado global está permanente expuesto a situaciones de inestabilidad donde las herramientas de la arquitectura financiera internacional tampoco están generando ese anclaje que permita estabilizar un sendero de crecimiento”, explicó.
Y concluyó: “ante este desafío, es fundamental construir las herramientas del Estado para potenciar estrategias de desarrollo nacional, y en ese sentido creo que Argentina tiene un sistema de bancos sobre los cuales apalancar esa experiencia”.
El titular de Banco Provincia participó del panel de cierre del seminario junto al presidente del BICE, José Ignacio de Mendiguren; el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; y el Ministro de Economía, Martín Guzmán. Entre los temas que fueron ejes de la jornada se destacaron: la nueva arquitectura en las finanzas internacionales, los cambios en los mercados mundiales y las oportunidades de Inversión sostenibles en Latinoamérica.
El mundo todavía transita los coletazos de sucesivas crisis sobre las cuales no hemos podido aún establecer las reglas de juego internacionales. El mercado global está permanente expuesto a situaciones de inestabilidad donde las herramientas de la arquitectura financiera internacional tampoco está generando ese anclaje que permita estabilizar un sendero de crecimiento.
Ante este desafío, es fundamental construir las herramientas desde el Estado para potenciar estrategias de desarrollo nacional, y en ese sentido creo que Argentina tiene un sistema de bancos de desarrollo sobre los cuales apalancar esa experiencia.